Santiago, apóstol. (F). Rojo.
Santiago es
el patrono de España, y, en nuestro país, de la provincia de Mendoza. El
compromiso con el evangelio, ha llevado a este discípulo de Jesús, uno
de los Doce, a entregar su vida. No se calló la boca. Quizás tuvo temor
por su vida o por la vida de su gente, pero su compromiso lo llevó más
allá de sus intereses.
LECTURA
2Cor 4, 7-15
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Corinto.
Hermanos:
Llevamos un tesoro en recipientes de barro, para que se vea bien que
este poder extraordinario no procede de nosotros, sino de Dios. Estamos
atribulados por todas partes, pero no abatidos; perplejos, pero no
desesperados; perseguidos, pero no abandonados; derribados, pero no
aniquilados. Siempre y a todas partes, llevamos en nuestro cuerpo los
sufrimientos de la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se
manifieste en nuestro cuerpo. Y así, aunque vivimos, estamos siempre
enfrentando a la muerte por causa de Jesús, para que también la vida de
Jesús se manifieste en nuestra carne mortal. De esa manera, la muerte
hace su obra en nosotros, y en ustedes la vida. Pero, teniendo ese mismo
espíritu de fe, del que dice la Escritura: "Creí y por eso hablé",
también nosotros creemos, y por lo tanto, hablamos. Y nosotros sabemos
que aquél que resucitó al Señor Jesús nos resucitará con él y nos
reunirá a su lado junto con ustedes. Todo esto es por ustedes: para que
al abundar la gracia, abunde también el número de los que participan en
la acción de gracias para gloria de Dios.
Palabra de Dios.
Comentario
Guardar
un tesoro en un recipiente de barro parece contradictorio y hasta
necio. Uno espera que un tesoro se guarde en lugares más nobles, pero
así es como Dios lo quiere. Nuestra pobreza hace más evidente la
grandeza de Dios.
SALMO
Sal 125, 1-6
R. Los que siembran entre lágrimas cosecharán entre canciones.
Cuando
el Señor cambió la suerte de Sión, nos parecía que soñábamos: nuestra
boca se llenó de risas, y nuestros labios, de canciones. R.
Hasta
los mismos paganos decían: "¡El Señor hizo por ellos grandes cosas!".
¡Grandes cosas hizo el Señor por nosotros y estamos rebosantes de
alegría! R.
¡Cambia, Señor, nuestra suerte como los torrentes del Négueb! Los que siembran entre lágrimas cosecharán entre canciones. R.
El sembrador va llorando cuando esparce la semilla, pero vuelve cantando cuando trae las gavillas. R.
EVANGELIO
Mt 20, 20-28
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo.
En
aquel tiempo: La madre de los hijos de Zebedeo se acercó a Jesús, junto
con sus hijos, y se postró ante él para pedirle algo. "¿Qué quieres?",
le preguntó Jesús. Ella le dijo: "Manda que mis dos hijos se sienten en
tu Reino, uno a tu derecha y el otro a tu izquierda". "No saben lo que
piden", respondió Jesús. "¿Pueden beber el cáliz que yo beberé?".
"Podemos", le respondieron. "Está bien, les dijo Jesús, ustedes beberán
mi cáliz. En cuanto a sentarse a mi derecha o a mi izquierda, no me toca
a mí concederlo, sino que esos puestos son para quienes se los ha
destinado mi Padre". Al oír esto, los otros diez se indignaron contra
los dos hermanos. Pero Jesús los llamó y les dijo: "Ustedes saben que
los jefes de las naciones dominan sobre ellas y los poderosos les hacen
sentir su autoridad. Entre ustedes no debe suceder así. Al contrario, el
que quiera ser grande, que se haga servidor de ustedes; y el que quiera
ser el primero, que se haga su esclavo: como el Hijo del hombre, que no
vino para ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por
una multitud".
Palabra del Señor.
Comentario
No
juzguemos el pedido de esta madre y de estos hermanos, porque el error
de ellos también puede ser el nuestro. ¿O no pensamos acaso que por ser
"del Señor" tenemos que tener ciertos beneficios, ya sea en la comunidad
o en la sociedad? Sin embargo, en el proyecto de Dios, al aceptar a
Jesús, lo que aceptamos es la cruz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario